Acabábamos de llegar a Oporto y estábamos esperando para registrarnos en nuestro alojamiento, este restaurante estaba justo fuera.
Pedimos francesinha como queríamos probar en nuestra corta visita a Oporto. La comida era buena, barata y abundante. Las papas fritas eran particularmente buenas y muy abundantes.
No te dejes llevar por la señalización descolorida y entrecierra las listas de precios fotocopiadas.