Es la 2ª vez que visitamos este restaurante y seguiremos viniendo siempre que vengamos a Bragança. Desde nuestro punto de vista: la mejor relación calidad/precio en los restaurantes de la zona. Es difícilísimo comer así por menos de 20€ .
Maravillosa lección de cómo preparar la excelente carne de la zona: tiernísima, sabrosa "posta mirandesa", sin desmerecer el resto. Un verdadero templo.
Hay que llegar pronto, no reservan mesas y las colas son significativas.
Um local super procurado, onde a comida é muito saborosa e servida em doses enormes. Adorei a costoleta de vitela. Grelhada como pedi. As batatas fritas que a acompanhavam, felizmente não eram de fábrica. As sobremesas só indo lá e provarem.